Obras mayores


Etapa que supuestamente presume de madurez y por la que así se considera mayor. Es el momento de buscar el Paraíso. Como no lo he encontrado, me lo he inventado, pero esto sí que es pecar de soberbia, supuestamente el peor de los pecados.


VIDA PERFECTA

A pesar del equilibrio la naturaleza no es sino un escenario donde distintas fuerzas pueden mostrarse a la luz del espectador de forma desagradable, llegando incluso a horrorizarle.
Los avances en la tecnología y los valores humanos no siempre revierten en favor de la justicia social.
¿Qué pasaría si las leyes naturales hubiesen sido diferentes en el origen?
¿Queremos apostar por ese hombre y esa mujer universal? ¿Justos y en igualdad de condiciones en cualquier circunstancia y nación? ¿O seguir apostando a la jugada parcial, interesada, religiosa, consumista, a la del egoísmo, y repetir los mismos acontecimientos, los de la injusticia, por medio de cualquier segregación, con el triunfo de un nuevo reinado de la pobreza, el hambre y la guerra?
Siempre he soñado mundos de excelsa perfección, de paz, de prístina y sencilla felicidad. En las horas de sueño, quizá porque mi mente estuviese descansando plácidamente de las terribles horas de vigilia, ha sido cuando se me comunicaron las maneras, los paisajes, los momentos, las formas y las gentes que uno quiere en la realidad. Mundos que ya despierto he seguido alimentando.
Andrés, nuestro protagonista, se ofrece como la alternativa; parece que en él pueden cohabitar distintos espacios, tiempos y sentidos de la vida.


VIDA PERFECTA II


(Lo que No Debe Ser y lo que Debe Ser)

El protagonista consigue desdoblarse en dos realidades, una bien real y otra bien pretendida. Nosotros, desde nuestro pobrísimo punto de vista, no advertimos todo lo que significa la cruda realidad. ¿O sí?


VIDA PERFECTA III

Estas historias, documentos, leyendas, relatos o cuento, son algunos que nos han llegado desde el pasado por medio de tablillas de barro, de estelas de piedra; por medio de soportes de cera, de papiros, del propio papel de los libros o de la memoria silícica; y por medio también de la siempre viva tradición oral. Son las que nos abren los ojos a través de sus informaciones reales y simbólicas, las que nos explican y nos hacen entender las vicisitudes pretéritas, y las que a su vez son pruebas prácticas de nuestro tercer volumen de la pentalogía “Vida Perfecta”, y que es el primero en ser publicado.


VIDA PERFECTA IV

Emulando la serie Tierra de gigantes, unos astronautas van desde el planeta de VIDA PERFECTA a otro, donde la vida es como realmente es en la Tierra.
Tratan con sacerdotes de todas las culturas, con hombres de ciencia, con empresarios sin escrúpulos, con ejecutivos de las multinacionales, con cualquier otro hombre o mujer que indigna la vida. Poseen, no obstante, una herramienta inoculada en sus genes: el mentalizador, con el que pueden cambiar la voluntad de los terranos u homínidos. Consiguen traspasar paredes y realizar viajes lejanos sobre la superficie de un planeta con gravitación, pero no funciona en viajes espaciales.
Este relato disparatado permite afrontar y enfrentar realidades, fobias y comecocos recurrentes, y demostrar cómo el valor del humor atempera el dolor y evita el mayor sangrado.


VIDA PERFECTA V

Sara y Andrés representan la pureza. Todos sus familiares, todos sus amigos, como todos los congéneres del Mundo que no conocen, son también puros. Sea entonces la semana, donde se producen los correspondientes acontecimientos de la presente novela, puros también.


EPISODIOS DE LA GUERRA CIVIL EN CLAVE 6

Seis voces para hacer visible un mismo dolor que nos sitúan en esa guerra civil aún presente.
Seis voces que nos hablan de esas elecciones personales e históricas. Del relato mismo, de la historia contada, transmitida de padres a hijos, la de Tobi y Myrna, la del poeta, la de los datos históricos...
Voces para mostrar cómo nos dejamos engañar por el poder y el dinero, cómo nos manipulan en nombre de las banderas, la raza, la religión. Cómo nos puede el egoísmo y la soberbia.
Seis voces que se convierten, a pesar de todo, en un clamor para la esperanza, en un “aviso a navegantes” para que tomemos las riendas y desechemos de nuestras vidas cualquier tipo de violencia. Sin excusas.


EL HIDALGO MODERNO

El Hidalgo Moderno cabalga entre planos bien diferentes. Bebe del pasado, de la interpretación del amor por las diferentes escuelas filosóficas teológicas, sufriendo en el presente la inexistencia de cualquier hidalguía. Pero en absoluto cabalga como un vulgar buscador o como un donjuán nocturno y alevoso. No pretende dominar, subyugar; es un verdadero hidalgo, es decir, va de frente siempre, porque solo quiere amar.

Simplemente sufre realidad, idealismo, y fantasía.